Tengo una amiga que todo lo pregunta por Facebook: "¿Conocen a alguna modista confiable?", "Me pueden decir de un buen dentista", "¿Qué películas están dando en el cine?". Y aunque pudiera parecer un hábito un poco molesto, ella está siguiendo el sentir del 92 por ciento de los consumidores globales y es que está demostrado (a diferencia del 2007 cuando era solo un 18 por ciento) que hoy en día las personas confían más en las recomendaciones de sus contactos en las redes sociales, de sus familiares, amigos, y hasta conocidos, que en cualquier otra forma de mercadeo existente en la actualidad.
Cuando una persona con muchos seguidores y credibilidad en su área (bloguero, tuitero, referente, celebridad) postea algún tipo de recomendación, difunde esto que menciona y crea visibilidad para dicho establecimiento, servicio o producto. Es lo que conocemos como un Influencer. Actualmente, utilizar este tipo de publicidad es un método seguido por muchas empresas para difundir y poner en boca de un gran público, su marca.
Si eres un emprendedor, profesional independiente o dirigente de una empresa que siempre está a la vanguardia, quizás te interese ahondar un poco más sobre este tema, por lo que hoy te daremos cuatro prácticos pasos para crear todo un movimiento mercadotécnico, utilizando esta novedosa fórmula y hacerlo de la forma adecuada:
Lo primero que debes hacer es identificar a un o una gurú en tu área. Esto significa por ejemplo, que si tienes una empresa de Contables y Auditores Internos, el influencer menos indicado para publicitar tu negocio sería una Fashion Blogger. Alguien conocido en el mundo de los números, sería el influencer más apropiado, como por ejemplo Alejandro Fernández, el economista dominicano conocido como Argentarium. Una vez que has identificado a tus influencers, síguelos en las redes sociales para familiarizarte con el contenido que muestran y el tipo de lenguaje que utilizan en sus posts. De igual forma, toma tiempo para leer los comentarios y las personas que dan "like" a estos comentarios de tus prospectos influencers, ya que de esta forma también identificarás mejor a tus potenciales consumidores.
Segundo, trata de crear una relación con estos influencers y sus seguidores. Hazlo lentamente, sin parecer un acosador, leyendo, comentando, haciendo sugerencias y escribiendo opiniones válidas y relevantes en sus posts.
En tercer lugar, es muy importante que, antes de aproximarte al influencer que hayas decidido utilizar para tu publicidad, sepas si esta persona está abierto a negociación y si es asequible. Es mucho más fácil contratar a un bloguero muy leído, por ejemplo, que a una celebridad internacional, no solo por lo difícil que es hacerle llegar un mensaje a alguien muy famoso, sino también por el costo que esto representa. Pregúntate ¿Qué estoy dispuesto a invertir en la promoción de mi negocio a través de un influencer? En el caso de que no seas una multinacional, no te desanimes si no te responden desde la primera vez que los contactes. Hazlo mínimamente en tres ocasiones y si no aceptan ser tu influencer, táchalos de tu lista y sigue adelante hasta que alguien diga que si.
Por último, con suerte se incrementará el tráfico en tus redes sociales y tu teléfono no dejará de timbrar, por lo que, y sobre todos si estás al mando de una PYME, la respuesta de los usuarios puede ser abrumadora, por su gran cantidad. Asegúrate de que todas las preguntas y comentarios de los potenciales clientes sean canalizados y respondidos adecuadamente durante este proceso y para siempre.
Foto: hireinfluence.com
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