Lo entendemos. Sabemos, como tú, lo difícil que es promocionar un servicio. Después de todo no es algo tangible. No es como un producto, que se puede ver, tocar, oler, estudiar y examinar de arriba a abajo. Un servicio es algo que solo puedes demostrar lo bueno que eres haciéndolo, con el paso de las horas e incluso de los días, y hasta peor, de los meses. Solo puedes demostrarlo, cuando te prueban.
Esta característica del servicio como modelo de negocio, puede ser un poco cuesta arriba cuando tienes que salir a promocionarlo. No es como salir a vender aires acondicionados o comida (que se prueba y listo). Es todo un reto.
John Warrillow, en su libro "Construido para Vender", nos indica que parte del éxito al momento de vender servicios, es, tratando el servicio como si fuera un producto. Es decir, hacer de lo intangible, algo tangible ante tus ojos y ante los ojos de los usuarios. Por lo que, es sumamente necesario documentar lo que pasa en tu empresa, es decir, armar una estructura por escrito.
Cuando hablamos de estructura, hablamos de algo que a muchos negocios les es muy difícil lograr, como es la documentación de procesos y la elaboración de manuales de procedimientos, manual de oficina, en fin, que la operación de la empresa esté íntegramente plasmada en papeles. Desde cosas tan sencillas como el Proceso de Cierre y Apertura de la Oficina cada día, hasta, el Proceso de Reclutamiento y Selección del Personal nuevo de la empresa. Absolutamente todo debe estar documentado. Te aseguro que si entras a McDonalds, por ejemplo, y quieres saber a cuantos grados fríen las papas fritas, encontrarás un manual que te da esta información supuestamente tan simple, pero que es parte fundamental del negocio y del producto.
En conclusión, documenta tu negocio y convierte tu servicio en un producto.
Foto: hrlinkgroup.com
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