Siempre hemos dicho que quien escoge la felicidad como estilo de vida no es como una champaña burbujeando todo el tiempo. La elección de vivir feliz, en atención plena y en bienestar, también tiene momentos de enojo y momentos de tristeza.
Discutíamos entre nosotros, qué se necesita para vivir dichos episodios de la forma más consciente posible. Unos opinaban, que necesitaban espacio y soledad para empezar de nuevo. Otros, que necesitaban el apoyo de sus seres queridos.
No importa que forma escojas para reiniciarte como un sistema operativo, lo importante es que aún teniendo motivos para no levantarte de la cama o para echarte a llorar en un rincón, sabes en el fondo que esto también pasará y que eres una persona interiormente feliz. También es importante no dar la impresión de que "todo está bien" si realmente está muy mal. No es que publiques tus desgracias en todas tus redes sociales o que dejes de bañarte por una semana y salgas a pregonarlo, sino que comuniques a las personas más relevantes en tu vida como te sientes y que necesitas un poco de tiempo para interiormente resolver algunos asuntos.
Si. Habrá momentos difíciles. Habrá pérdidas. Pero no es el fin del mundo y puedes y debes seguir adelante. Aunque suene a cliché, detrás de la tormenta siempre hay un hermoso cielo azul y un sol que no pierde su luz ni su fuerza. Estar conscientes de esta información, es lo que llamamos, estar tristes con el conocimiento de que somos felices.
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