No por nada, Medellín es la sede de una de las ferias textiles más importante del mundo conocida como Colombiatex, a la cual tuvimos la suerte de asistir. Gracias a esta maravillosa coincidencia de encontrarnos envueltos en este magno evento, pudimos constatar que Medellín es una ciudad enérgica, vibrante, llena de emprendedores.
Localizada en Colombia en el departamento de Antioquia, esta pujante y hermosa ciudad de menos de tres millones de habitantes, se sitúa en un pequeño valle en medio de majestuosas montañas y a más de 1,200 metros de altura sobre el nivel del mar.
Una de las mejores formas de conocer una ciudad nueva es hablando con la gente. A mi particulamente me encanta hablar con los taxistas, porque como andan dando vueltas para arriba y para abajo y se encuentran con tantas personas distintas y tantas situaciones, son los que mejor pueden darte una visión general del nuevo lugar donde te encuentres. Mi taxista, del aeropuerto al hotel, me dijo: "Los antioqueños somos emprendedores por naturaleza", Lo que significa que no les da miedo crear sus propios negocios o tener más de un trabajo, si la situación lo amerita.
Aparte de su palpable espíritu emprendedor, y de forma muy personal, estas fueron a grandes rasgos las características más notables que pude apreciar de Medellín:
Los habitantes de Medellín son personas sumamente agradables, relajadas y simpáticas. Tienen un gran concepto del Servicio al Cliente y en todo lugar que vas tienen preparada una sonrisa y "en que le puedo colaborar" con la que parece ser la más grande disposición para realmente servirte. Son muy educados y conversadores, por lo que puedes aprender más preguntando que observando.
El gobierno de la ciudad, está tratando de alejar a Medellín de la imagen que la vincula con Escobar. Y aunque si, muchos conocemos a Colombia por las películas de Hollywood y acontecimientos sonados de la vida real, por los secuestros, las guerrillas, las drogas y los coche bombas, actualmente nada más lejos de la realidad, al menos lo que puede percibirse. Puedes salir de noche, solo o acompañado sin ningún problema (respetando ciertas áreas como en cualquier otra parte del mundo) y las personas en los carros andan con el vidrio abajo, señal de que no hay muchos robos (a diferencia de Guatemala y hasta República Dominicana, donde asaltan en los vehículos constantemente). Esta seguridad se debe a controles rigurosos y a una fuerza policial que se ve en cada esquina, atentos a su labor.
Medellín es, desde principios del siglo pasado, una ciudad industrializada por lo que hay mucha variedad en todos los sentidos. Muchas actividades de producción que pueden originar negocios y alianzas interesantes para nuestro país. Hay mucha creatividad, buena calidad, diferenciación en tantos productos tan diversos, desde herrajes, botones, zippers, telas, impresiones, étc, étc, étc. En los Centros Comerciales encuentras todas las grandes marcas tanto locales como internacionales.
Las personas de Medellín, nacieron parece que con el buen gusto en sus genes. Los puedes ver siempre muy a la vanguardia, pero con algún que otro toque original y propio. Son respetuosos de la ley y conviven en franca armonía en sus distintas formas de vida: bohemios, artistas, intelectuales, políticos, empresarios, turistas. Todos juntos pero no revueltos, unidos con el fin común de seguir sacando a Medellín de su oscuro pasado y de convertirla sin duda, en una de las ciudades más modernas, seguras, divertidas y respetadas del continente americano.
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